Día Mundial del Refugiado: La educación como eje de transformación

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Enseña por Colombia
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Students in school uniform stand outside holding shovels and bottles as they participate in a science experiment

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Según la Agencia de la ONU para los Refugiados - ACNUR, a finales del año 2023 aproximadamente 117.3 millones de personas habían sido desplazadas de sus lugares de origen huyendo de persecuciones, conflictos, violencia y violaciones a sus derechos humanos. Esto significa que una de cada 69 personas en el mundo ha debido alejarse de sus raíces, su familia y amigos, sus lugares favoritos y su hogar para llegar a una nueva cultura, generalmente en condiciones de empobrecimiento estructural.

De ellas, alrededor de 6.1 millones de personas vienen de Venezuela y han permanecido en países latinoamericanos, con 2.9 millones permaneciendo en Colombia. En el mundo, Venezuela es el tercer país del que provienen más personas refugiadas o en condiciones similares, después de Afganistán y Siria.

Los niños y niñas provenientes de Venezuela han llegado así a nuevos entornos educativos donde enfrentan el gran desafío de retomar sus procesos de aprendizajes después de un momento trascendental en sus vidas. Enseña por Colombia, como parte de su alianza con el Programa Regional de Liderazgo para el Cambio en la Educación de USAID, ha colaborado con USAID en regiones priorizadas donde se identificó una cantidad significativa de estudiantes provenientes de Venezuela que requerían acompañamiento para adaptarse a las nuevas situaciones que enfrentaban en su vida cotidiana. Más de 1.700 estudiantes venezolanos en estos tres años han pasado por aulas lideradas por Ecos extraordinarios que, como parte de su formación en liderazgo, aprenden sobre interculturalidad y adoptan estrategias integrales para garantizar el acompañamiento que requieren sus estudiantes.

Por ejemplo, para Norelvis Salgado, estudiante de sexto grado en la Institución Educativa Rosedal de Cartagena (Colombia), adaptarse a su nuevo entorno resultó ser un proceso complejo a pesar de haber llegado al país cuando tenía dos años con sus hermanas, cuñado y sobrino. Establecerse en un barrio muy pequeño y diferente al lugar del que venía significó adaptarse a una nueva realidad, muy diferente a la que había vivido en su casa.

Sin embargo, Norelvis habla con mucho cariño de su colegio en Colombia, pues le gusta “que es muy dinámico y es muy divertido cuando estamos acá”. Su materia favorita, biología, es impartida por su profesora Laura Cepeda, una de las Ecos de Enseña por Colombia que transforma la educación día a día en las aulas del país a través del liderazgo colectivo que ejerce y que busca impulsar en sus estudiantes. Uno de los procesos que promueve es la restauración de la huerta del colegio, donde empodera a sus estudiantes para que lideren la transformación de su entorno mientras aprenden sobre ciencias naturales. “Un momento importante para mí con la profe Laura fue cuando estábamos ayudando en la huerta para restaurarla” afirma. Por su parte, Laura destaca de Norelvis que “ella siempre llega con la mejor actitud, llega con una sonrisa al colegio [...]  y siempre está dispuesta a ayudar cuando uno necesita algo, siempre está dispuesta a colaborar y siempre tiene una muy buena disposición.”

Al igual que Norelvis, el estudiante de sexto grado Esteban Contreras llegó a una temprana edad a Colombia junto a sus tías, su abuela y su papá. Aunque su mamá se quedó en Venezuela, para él Colombia es el lugar donde se ha criado y su colegio es un lugar donde puede aprender cosas asombrosas, sobre todo su materia favorita: matemáticas. En sus clases de ciencias naturales, su profesora Laura destaca a Esteban como un estudiante comprometido que siempre da lo mejor de sí mismo; mientras tanto, Esteban señala que “lo que más me gusta de mi profe Laura son sus actividades lúdicas y que nos enseña algo nuevo”. Por eso, uno de sus momentos favoritos con ella “fue la feria del año pasado, cuando hice un proyecto sobre las energías. Mi proyecto fue sobre el aire.”

Esta feria es también un momento muy apreciado por Albert Farfán, otro estudiante de sexto grado de la Institución Educativa Rosedal que en el marco de este evento hizo una maqueta sobre tipos de energías donde puso en práctica su talento artístico, pues artes es su materia favorita. “Un momento importante para mí con mi profe Laura fue cuando hicimos la maqueta sobre las energías de agua, viento y tierra en la feria.” Albert llegó a los cinco años con su papá a Colombia para reencontrarse con su mamá, quien ya estaba trabajando y viviendo en el país. Aunque viviendo en Venezuela se sentía más seguro que en su nueva vivienda, se ha adaptado a su nuevo entorno con el apoyo de personas fundamentales como la profe Laura, quien habla de los cambios que ha afrontado su estudiante y la forma en que ha podido llevarlos. Ella valora especialmente de Albert el hecho de que siempre ha tenido muy claro quién es, sus valores y su forma de ser, demostrándolo cada día. “Siempre has tenido muy claro quién eres y la forma en la que haces valer lo que eres, con todos tus valores y tu forma bonita de ser.”

Como Laura, muchos Ecos más están cada día creando en las aulas entornos seguros, donde sus estudiantes migrantes sean acogidos con amor en sus comunidades educativas. Esta decisión consciente de impulsar estos espacios parte de su liderazgo con el propósito de cerrar las brechas de desigualdad en Colombia y el mundo. Ellos y ellas acompañan los procesos que sus estudiantes están viviendo: tanto Albert como Norelvis destacan, por ejemplo, que su acento y su forma de hablar son uno de los cambios que han evidenciado.

Tanto desde su rol en las aulas como desde sus roles de incidencia siendo parte de la red Alumni, la comunidad de Enseña por Colombia apuesta por una educación transformadora que apoye los inmensos sueños de sus estudiantes y permita que alcancen su máximo potencial. Norelvis sueña con ser una doctora que ayude a muchas personas, Esteban sueña con estudiar y trabajar en una gran empresa en el futuro, y Albert sueña con ser un piloto de NASCAR, como le gustaría a su papá. Sin embargo, a pesar de la diversidad de sus sueños, todos coinciden en un punto: los tres sueñan con apoyar a sus familias para brindarles un futuro mejor.